Cine Porno: ¿Sexo o Arte?

Cine Porno: ¿Sexo o Arte?

Me encontraba hace unos días comentando esta cuestión con unos amigos, y me ha parecido interesante plantearles esta cuestión a ustedes, el debate se centra en si el cine porno debe ser única y exclusivamente sexo, para disfrute del personal, o bien debe tener alguna consideración artística que vaya más allá de la simple demostración de sexo explícito en la pantalla. Mi opinión, como ya he indicado en anteriores ocasiones, es que el cine porno debe intentar alcanzar un mínimo de expresión artística, debe buscar insertar convenientemente las escenas de sexo en una historia, que esté bien argumentada, crear una ambientación favorable al mismo y cuidar las formas plásticas y visuales de la narración fílmica.

Quienes sostienen una opinión diferente, consideran que estos aspectos sólo son artificios que esconden lo que verdaderamente importa que es el sexo, ya que el espectador que ve una película porno, tan solo está interesado en eso: permítanme la expresión ver follar en la pantalla. Lamentablemente en el porno español este debate no tiene sentido ya que no se ruedan películas, y todo ha quedado reducido a escenas para Internet, donde el usuario sólo tiene interés en el sexo, lo cual tiene su lógica por el formato en que se encuentra.

Así que la filosofía del debate va para países que ruedan en los dos sistemas: cine e Internet como son USA y Francia, y en los que podemos ver y observar como diferencian bien entre lo que se produce para cine, que mantiene la posición defendida por mí, y lo producido para Internet donde sólo interesa el sexo. Es España se dice que no se rueda cine por imperativos económicos, no es rentable es el discurso general, pero y o pregunto ¿es rentable Internet?, realmente se gana dinero cuando existen cientos o miles de páginas con escenas gratuitas, ¿interesa de verdad pagar por ver escenas con escaso interés, en mi opinión, sexual?.

Creo que no y por lo que sé no mucho, lo que pasa es que se rebajan costes, se paga muy mal a los actores, no se gasta casi nada en localizaciones ni en iluminación y demás; resultado un porno esperpéntico y carente de calidad, en los que los profesionales entran y salen con mucha facilidad, y que ha caído en el submundo de lo prohibido y mal mirado de la sociedad.

Lejos quedan los tiempos cuando se rodaban películas en España, no tanto por eso, cuando se tenía un star system, si bien muy frágil como se ha demostrado, y los profesionales eran respetados y formaban parte de la normalidad social. Tal vez si se hubiera seguido por la línea de rodar películas aquellas lluvias no hubiesen traído estos lodos.

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